Nadie podrá ser condenado a la
pena de muerte ni ejecutado.
Existen muchas situaciones en
las que el Estado puede quitar la vida a las personas sin infringir las leyes
internacionales de los derechos humanos. En algunos casos, estas excepciones se
basan en la premisa de que el uso de la violencia usada en defensa propia es justificado.
Ejemplo:
Provocar la muerte de un condenado por
parte del Estado, como castigo por un delito establecido en la legislación; los
delitos a los cuales se aplica esta sanción penal suelen denominarse “crímenes”
o “delitos
capitales”. La pena de muerte sigue siendo legítima y practicada en
varios países alrededor del mundo. Algunos países han prohibido la pena de
muerte exceptuando los casos más extremos como por ejemplo los crímenes
cometidos durante la guerra. Otros países aunque no han prohibido la pena de
muerte, son en la práctica, abolicionistas, al no sentenciar a muerte a los
delincuentes.
Historia
Donde el
primer delito castigado con la pena de muerte fue el perdullio traición a la patria.
Más tarde se aplicó también a otros delitos, siendo esta la pena imperante. Un
tiempo después y aunque sin ser abolida cayó en desuso, restableciéndose
posteriormente con los emperadores.